Pareja de exgobernadores de Rio presa nuevamente por sospecha de corrupción
Fotografía: Marco Antonio Recende - EFE




Sao Paulo, Brasil.

Los exgobernadores de Rio de Janeiro, Anthony Garotinho y Rosinha Matheus, fueron encarcelados la mañana de este martes bajo sospecha de participar en un esquema de corrupción vinculado a la constructora Odebrecht, informó la fiscalía regional.

El Ministerio Público de Rio de Janeiro afirma que la alcaldía de Campos sobrefacturó contratos para la construcción de diez mil casas populares durante la gestión de Rosinha como alcaldesa (2009-2017).

Además de Rosinha y su esposo Garotinho, otras tres personas fueron blanco de órdenes de prisión.

La pareja fue detenida en su residencia a primera hora de la mañana y llevada a un complejo policial.

Con la reclusión de la pareja, que comandó Rio de Janeiro entre 1999-2002 y 2003 y 2007, son cuatro los gobernadores del estado que están presos. También tras las rejas están Luiz Fernando Pezao (2014-2018), acusado de corrupción y preso durante su ejercicio, y su antecesor Sergio Cabral (2007-2014).

Garotinho, que también fue alcalde de Campos, intentó candidatearse a la gobernación en 2018, pero fue impedido por la justicia electoral.

La fiscalía que ordenó la prisión de este martes argumenta que la redacción de las licitaciones evidencia que fueron hechas de forma que sólo Odebrecht ganaría los contratos de los programas de vivienda popular gestionados durante los mandatos de Rosinha.

Las licitaciones costaron a los cofres públicos más de mil millones de reales (unos USD 250 millones al cambio actual) y las obras no fueron concluidas.

"Los entretelones de los contratos celebrados entre el municipio de Campos y Odebrech fueron revelados después de declaraciones dadas al Ministerio Público Federal por dos exejecutivos de la empresa", bajo acuerdos de delación en el marco de la operación anticorrupción Lava Jato.

Es la cuarta vez que el exgobernador Garotinho va preso. En noviembre de 2016 fue preso por una investigación por compra de votos. Casi un año después, en septiembre de 2017, volvió a ser preso por sospecha de fraude electoral, en tanto que en noviembre del mismo año fue preso por irregularidades en un contrato de campaña, también junto a su esposa Rosinha, que con la de este martes suma dos prisiones.