Pandemia pone de manifiesto la falta de sensibilidad de la sociedad en Sierra de Amula
Fotografía: EFE/Juan Ignacio Roncoroni / Referencial




Autlán de Navarro, Jalisco. 

Durante la actual emergencia sanitaria por el virus SARS-CoV-2, las redes sociales han jugado un papel muy importante en la difusión de información. A través de éstas, medios de comunicación, gobiernos y organismos internacionales han compartido estrategias y recomendaciones para hacer frente a la pandemia.

A la par de estas bondades, mediante estas plataformas se ha demostrado la falta de sensibilidad, ética y empatía de la sociedad frente a las situaciones que esta pandemia propicia. Cuando se presentaron los primeros casos de COVID-19 en la región, las redes sociales se llenaron de publicaciones amarillistas, comentarios morbosos y atacantes contra los portadores del virus, además se filtraron datos personales atentando contra la dignidad humana de los portadores y sus familias.

En esto coincidieron los profesionales que participaron en el webinar “Respuesta social ante los contagios por COVID-19” organizado por El Colegio de Psicólogos de Jalisco Delegación Costa Sur.

Carmen Aída del Toro Lomelí, coordinadora de la Delegación, dijo que la pandemia ha puesto de manifiesto cómo estamos estructurados como sociedad y como humanos.

“El COVID-19 vino a poner en evidencia como estamos estructurados como sociedad autlense y como humanos, donde hemos visto ultrajada la intimidad, puesto en riesgo la integridad física y psicológica tras el positivo que nadie espera. Compartir fotos, llamadas telefónicas, ubicación de vivienda, hacer mal uso de datos sensibles y chismorrear es propagar algo más terrible que el propio virus y solo muestra nuestros miedos irracionales, prejuicios y violencia”.

Por su parte Juan Ignacio Arroyo Verástegui, coordinador de Protección Civil y Bomberos de Autlán dijo que el patrón del comportamiento de la sociedad ha sido el mismo en Autlán, El Grullo y Cuautla, donde no se guardó la confidencialidad de los pacientes.

“Por nuestra idiosincrasia en los pueblos sucedió un patrón muy similar en Cuautla, Autlán y El Grullo, donde tuvimos la presencia de la negación de un duelo, porque no se guardó la confidencialidad, la parte privada que debió cuidarse. Esta experiencia nos demuestra que requerimos una cultura que nos permita guardar y respetar”.

Se demostró además que a pesar de la información que han dado a conocer las fuentes oficiales del sector salud se desconoce el comportamiento del virus ya que las personas esperaban ver a los portadores en estados graves y hospitalizados.

Ana Lily Santana Villa, visitadora adjunta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos con adscripción en Autlán, Señaló que existe una corresponsabilidad con el resto de seres humanos, y que no solo servidores públicos si no toda la ciudadanía está obligada a capacitarse, proteger, respetar y reparar los derechos humanos que hayan sido vulnerados. Agregó que aquellos que han sido vulnerados en sus derechos pueden proceder por la vía civil, penal y administrativa.

“Les quiero comentar a las personas que han sido vulneradas y aquellas que han vulnerado que podemos enfrentar una responsabilidad penal, civil y administrativa. Aquellas que han sido vulneradas en sus derechos, pueden proceder por la vía penal, civil o administrativa. Es un mecanismo que nos va permitir obligarnos a cambiar de chip y proceder por la vida desde un andamio de respeto”.


Antonio Díaz