Guadalajara, Jalisco.

El nuevo etiquetado de alimentos no tiene mayor efecto en la orientación de las compras, según una encuesta hecha a pequeños comercios de Jalisco, Tabasco, Colima, Valle de México, y Estado de México.

Siete de cada diez establecimientos no han visto una modificación en los hábitos de los consumidores por encontrar en los productos sellos negros que advierten que contienen exceso de calorías, exceso de azúcares, exceso de sodio, exceso de grasas saturadas, exceso de grasas trans, y edulcorantes, explicó el presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes, Cuauhtémoc Rivera.

“¿En qué se fija a la hora de comprar? Seis de cada diez en el precio, dos de cada diez en la marca y el 14% en promociones y ofertas. Si ustedes se dan cuenta lo que determina la venta fundamentalmente es el precio. Para hábitos saludables lo que los comerciantes creemos que puede determinar un cambio hacia hábitos saludables: el 45.9% cree que es educación y 32.86 cree que es problema del bolsillo”.

El 60% de los pequeños comercios todavía no registra afectaciones en sus ventas por esta medida.

Los comerciantes ven más peligrosa para su negocio la prohibición de la venta de comida chatarra a menores de edad aplicada en Oaxaca y Tabasco.

El 92% de los encuestados consideró que si la restricción se extendiera a todo el país se caerían sus ventas en más de 30%.

El nuevo etiquetado de alimentos entró en vigor el 1 de octubre y se concedió una prórroga sin sanciones hasta el 30 de noviembre.