Autoridades mexicanas hallaron un túnel en construcción que se presume sería para traficar droga desde Tijuana (noroeste) hacia la ciudad estadounidense de San Diego, el tercer subterráneo de este tipo hallado en esa localidad mexicana en lo que va del año, informó este lunes el Ejército.

Militares realizaban patrullajes de vigilancia el jueves pasado cuando encontraron "un túnel en el interior de una bodega" de una empresa denominada Hega, que supuestamente se dedicaba a importar y exportar productos, señaló en un comunicado la II zona militar ubicada en Tijuana.

Esta bodega está ubicada muy cerca del puente internacional de Otay, un concurrido puerto de aduanas de Estados Unidos para personas y mercancías, localizado en la ciudad de Tijuana (1.6 millones de habitantes).

El subterráneo, al que se ingresaba por el piso removible de una oficina de la bodega, tenía una longitud de 126 metros, sin que aún tuviera salida del lado estadounidense.

Para acceder al túnel de 1.70 metros de altura y 1.30 metros de ancho había que descender por una escalera de 5.71 metros. El comunicado precisó que el túnel contaba con sistemas de iluminación y ventilación, así como con rieles de metal. 

El subterráneo fue hallado a unas tres calles de donde viejos narcotraficante mandaron cavar en la década de 1990 el primer túnel de la frontera mexicana hacia la estadounidense California, para pasar clandestinamente mercancías y personas.

De acuerdo con autoridades de Baja California, donde se ubica Tijuana, en los últimos 25 años han sido localizados y desmantelados 40 de estos túneles.

Dos de estos subterráneos fueron hallados en abril pasado en esta entidad, uno de ellos en Mexicali, fronteriza con Caléxico, en una casa en cuya cochera estaba la entrada al túnel que llegaba al Canal Todo Americano, de donde salían las personas para llevar droga buceando en las aguas negras hacia el lado estadounidense.

Los carteles de narcotráfico recurren a todo tipo de métodos para traficar la droga hacia Estados Unidos y los túneles también han sido utilizados por ellos para escapar de las cárceles. 

La fuga más espectacular fue protagonizada en julio pasado por el capo Joaquín "Chapo" Guzmán, quien logró huir por un túnel de 1.5 kilómetros al que ingresó por la regadera de su celda en un penal de máxima seguridad hacia el exterior, a 90 kilómetros de la capital.