Italia urge a México a resolver el caso de tres italianos desaparecidos




Ciudad de México, México.

El gobierno italiano pidió este miércoles a México una "urgente solución" al caso de los tres italianos desaparecidos desde el 31 de enero en el estado de Jalisco.

El ministro italiano de Relaciones Exteriores, Angelino Alfano, expresó "la fuerte preocupación" de Italia por la desaparición de los italianos a su homólogo mexicano Luis Videgaray en el curso de una conversación telefónica, informó la cancillería en un comunicado oficial.

"Personalmente lo sensibilicé para que se ocupe de la urgente solución del caso", afirmó Alfano.

Por su parte, la cancillería mexicana confirmó con una nota oficial la conversación telefónica entre los dos ministros e hizo más hincapié en el acuerdo para fortalecer la cooperación judicial entre los dos países que en el caso de los desaparecidos.

"Ambos cancilleres acordaron fortalecer la cooperación judicial entre México e Italia, así como realizar todos los esfuerzos para que se realicen las investigaciones necesarias con la finalidad de garantizar el desahogo de todas las diligencias jurídicas, el debido proceso y el acceso a la justicia para los italianos desaparecidos", reza el comunicado.

La fiscalía mexicana confirmó el lunes que busca a otros tres policías involucrados en el caso además de los cuatro, ya detenidos, acusados de haber "vendido" a bandas criminales a los italianos, que habían capturado en una gasolinera.

"Manifesté al colega el deseo de que nuestros compatriotas sean rápidamente encontrados y que los responsables de ese crimen sea entregados a la justicia", añadió Alfano.

"El ministro Videgaray me aseguró que para el gobierno de México es una prioridad encontrar a nuestros compatriotas así como garantizar plena justicia para los involucrados", recalcó el canciller italiano.

Los familiares de Raffaele y Antonio Russo y Vincenzo Cimmino, de 60, 25 y 29 años, todos originarios de Nápoles, denunciaron que los tres desaparecieron el 31 de enero tras ser detenidos por la policía del municipio de Tecalitlán en una gasolinera.

La fiscalía mexicana confirmó sucesivamente que la detención ocurrió en ese sitio, que los policías ya detenidos actuaron por órdenes de criminales y que no hicieron reporte alguno de la captura de los italianos.

Los tres italianos se encontraban en México para vender generadores eléctricos, que según las investigaciones presentaban como piezas de una marca alemana cuando al parecer habían sido fabricadas en China.