Miles de personas asistieron a una verbena en Monterrey (noreste) convocada por Jaime Rodríguez "El Bronco", en su asunción este domingo como el primer gobernador independiente de México y a la que llegó a caballo acompañado de cientos de jinetes.

En la Arena Monterrey, el flamante gobernador del industrial estado de Nuevo León pidió a "diputados y senadores de partidos", que en México disponen de numerosas prestaciones, que tomen medidas de austeridad y "rascarse con sus propias uñas (vivir acorde a su salario y limitar el uso de bonos extras), que es lo que este país quiere".

"Vamos a construir el puente más grande de México y del mundo, el puente que une a pobres y ricos", dijo en una conferencia posterior al festejo de la Arena Monterrey, en el que fue bañado de porras al grito de "¡Sí se pudo, sí se pudo!" y "¡Bronco! ¡Bronco!".

Nuevo León, sede de poderosas empresas como la cementera Cemex, es una de las regiones de México que tiene los más altos índices de desigualdad, según mediciones de organismos internacionales como la ONU.

"No es posible que tengamos a Noruega (en referencia a su nivel de desarrollo per cápita) en San Pedro (el municipio más rico de Nuevo León y el segundo más rico de México) y a Sudáfrica en San Bernabé (el barrio marginal de Monterrey)", espetó Rodríguez -exalcalde del municipio de García por el oficialista Partido Revolucionario Institucional, PRI-, al hacer una analogía sobre la amplia brecha de ingresos y calidad de vida que separa a los 4 millones de habitantes de Nuevo León.

"No soy Superman ni Santa Claus" 

Calzando botas negras, vestido con pantalón de mezclilla y chaleco de cuero, y portando sombrero ranchero, Jaime Rodríguez hizo también un llamado a la unidad política. 

"No me dejen sólo legisladores, alcaldes y pueblo, porque no soy Superman ni Santa Claus", exclamó el político que en septiembre del año pasado dejó su militancia de más de tres décadas en el PRI.

El sacerdote Alejandro Solalinde, defensor de los derechos de indocumentados, el líder de grupos de autodefensa de Michoacán (oeste) Hipólito Mora, y otra docena de gobernadores acudieron a la Arena Monterrey, a la que asistieron unas 8.000 personas, dijo a la AFP un portavoz del equipo del gobernador.

El hecho de que en México -que en más de 80 años sólo ha sido gobernado por el PRI y por el conservador Partido Acción Nacional- tenga un gobernador independiente por primera vez "es una esperanza, ahora esperemos que cumpla porque ha generado muchas expectativas, y que sea un ejemplo a nivel nacional", dijo a la AFP Alejandro Solalinde, blanco constante de amenazas de muerte por su defensa de inmigrantes indocumentados, víctimas de asaltos y asesinatos a manos del crimen organizado.

"Aquí no vamos a dejar trabajar a los delincuentes", sostuvo "El Bronco" en la conferencia de prensa, en una breve alusión a la violencia que padece Nuevo León derivada del narcotráfico. 

Casa "sucia" 

"El Bronco" acudió hacia la medianoche del sábado al Congreso estatal para la ceremonia oficial del cambio de mando estatal. 

"Encontramos la casa sucia, las columnas derruidas, fugas por todas partes, y para acabarla de fregar, hipotecada", dijo ante el Congreso, en presencia de su antecesor, el exgobernador del PRI, Rodrigo Medina.

Cerca del mediodía del domingo, el gobernador partió a caballo del Puente del Papa del centro de Monterrey hasta la Arena Monterrey del Parque Fundidora, emblema de la historia industrial de esta localidad.

A la cabalgata de 8 km acudieron unos 800 jinetes en todo tipo de caballos, la mayoría dignos de carreras profesionales, aunque también hubo alguno que otro que llegó en burros y hasta en mulas, respondiendo a la convocatoria de "El Bronco" en redes sociales para festejar el inicio de sus seis años de gobierno y que considera la "segunda revolución mexicana".

Rodríguez obtuvo 48,86% de los votos en las elecciones intermedias de junio pasado.

En esos comicios, el candidato independiente Pedro Kumamoto, también sorprendió al ser elegido diputado por una región de la zona conurbada de Guadalajara (oeste), la segunda ciudad en importancia del país, gastando en su campaña sólo poco más de 1.000 dólares. 

El triunfo de Rodríguez, Kumamoto y otros políticos independientes evidenciaron "el hartazgo" de los mexicanos con los partidos mayoritarios, según expertos.