Movimiento Ni una menos vuelve a marchar en Argentina contra feminicidios




Buenos Aires, Argentina

Argentina volverá a agitar este sábado consignas contra la violencia de género con una marcha del movimiento Ni una Menos al cumplirse tres años del primer gran grito callejero para decirle basta a los femicidios.

"Ni una menos, vivas nos queremos, contra la complicidad estatal", es la consigna principal de la marcha que en la capital argentina unirá distintos puntos para converger en un acto en la Plaza de Mayo, frente a la sede gubernamental, hacia las 18H00 (21H00 GMT).

Pese a la agitación social que ha puesto en la agenda política la violencia de género en todas sus formas, los asesinatos de mujeres, en su mayoría a manos de sus parejas o exparejas, no han dejado de crecer en el país sudamericano.

Un registro de la Corte Suprema de Justicia, difundido el miércoles, indica que en 2016 hubo 254 femicidios, 19 más que el año anterior.

Datos relevados por la organización no gubernamental Mujeres de la Matria Latinamericana (Mumalá) indican que entre enero y abril de 2017 la ola de femicidios creció a un promedio de uno cada 25 horas.

Pero si el movimiento Ni una menos, surgido en 2015 frente a una serie de femicidios aberrantes, no ha logrado detener la violencia de género, sí parece haber conseguido empujar a las víctimas a pedir ayuda.

Según un relevamiento del Consejo Nacional de las Mujeres aumentó en 55% la cantidad de mujeres que llamaron por primera vez a la línea telefónica gratuita para pedir asistencia.

De unos 90 llamados diarios en el primer cuatrimestre de 2016, en el mismo periodo de este año se registraron 140 llamadas por día de mujeres que utilizan esa vía por primera vez.

Sin embargo víctimas han denunciado abandono del Estado y aseguran que su vulnerabilidad frente a los hombres que las golpean crece luego de denunciarlos.

Karina Abregú sobrevivió a un intento de homicidio por parte de su exesposo, condenado en 2016 a 11 años de prisión por tentativa de femicidio tras haberla prendido fuego y causarle gravísimas quemaduras en el 55% de su cuerpo. Antes del ataque lo había denunciado 15 veces.

“Hoy es un día muy emotivo, seguimos luchando para que ninguna mujer sufra lo que yo sufrí. A mi ex marido lo condenaron por la lucha de las mujeres, no por la Justicia”, dijo Karina este sábado a la FM La Patriada en la antesala de la marcha.

Por eso esta vez, la movilización pondrá la lupa en las acciones del Estado para detener los femicidios y ayudar a las víctimas.

El pasado miércoles el Congreso aprobó una ley para suspender la responsabilidad parental a los femicidas y a quienes causen lesiones gravísimas a sus parejas o abusen sexualmente contra hijos e hijas, una norma que los colectivos feministas reclamaban hace años