México, EEUU y Canadá lanzan programa monitoreo de mariposa Monarca
Fotografía: Armando Solís - Xinhua




Ciudad de México.

México, Estados Unidos y Canadá lanzarán un programa de monitoreo con el cual se busca conocer con mayor claridad la distribución de las poblaciones migratorias de la mariposa Monarca en América del Norte, informaron hoy fuentes oficiales.

De acuerdo con un reporte de la Comisión Nacional de Areas Naturales Protegidas (Conanp) de México, la iniciativa denominada "Blitz Monarca 2019" se llevará a cabo del 27 de julio al 14 de agosto e involucra a cientos de voluntarios de los tres países antes mencionados.

El programa incluye visitas a jardines, parques y áreas verdes para monitorear las plantas de Asclepia (o algodoncillo) en busca de huevos, larvas y crisálidas de Monarca, así como ejemplares adultos para obtener la mayor cantidad de información sobre esta especie, así como una imagen instantánea del estado que guardan sus poblaciones.

"El propósito de este programa es concientizar e involucrar la ciudadanía en la conservación de este singular evento natural, así como ayudar a identificar los sitios de reproducción, alimentación y refugio que son vitales para su supervivencia", detalló la dependencia.

Una vez obtenidos los datos, la información estará a disposición del público en general, a través de la Red Trinacional de Conocimiento sobre la Mariposa Monarca.

El programa será coordinado por la Alianza Científica Trinacional en favor de la Conservación de la Mariposa Monarca, que se integra por la Conanp de México, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos y el Insectario de Monteral (Canadá).

En México, las primeras mariposas Monarca comienzan a ingresar en los primeros días de octubre por el norte del país y cruzan una decenas de entidades mexicanas, para llegar a los estados de México y Michoacán, lo admirable es que este insecto, con un peso de menos de un gramo, recorre entre 3 mil y 5 mil kilómetros.

De acuerdo con la Conanp, las poblaciones de la mariposa Monarca aún se encuentra muy por debajo de los niveles históricos, lo que plantea interrogantes en torno a los esfuerzos de conservación requeridos para mantener esta tendencia favorable.