Guadalajara, Jalisco.

Yolanda García dejó de trabajar desde el 22 de mayo. Tiene que sacar adelante a otros tres hijos, uno de siete, pero está a pie de cama a un lado de Elizabeth de la Rosa García, su primera hija, quien la convirtió en abuela por primera vez con el nacimiento de Tadeo.

Es diabética y recuerda que, cuando le avisaron que su hija y nieto estaban siendo trasladados de urgencia porque incendiaron el camión en el que viajaban la tarde del mismo día que atentaron contra Luis Carlos Nájera, el secretario de Aristóteles Sandoval, veía nublado, no sabe ni cómo caminó y logró llegar hasta Eli, su hija de 26 años que lucha y progresa en su estado de salud.

Resultó con quemaduras de tercer grado en un 92% su cuerpo.

Nadie le ha dicho aún con claridad que su bebé de

Confirma Gobernador muerte de menor tras hechos delictivos

">ocho meses falleció. Ya abrió los ojos y ha platicado con Yolanda, progresa y se asoma el escenario para trasladarla, pero la familia mantiene sus inquietudes. En entrevista exclusiva para Señal Informativa, Yolanda García las describe.

Se ha bajado la medicina para el dolor por temor a que una taquicardia le provoque un infarto. Explica que va a buscar una psicóloga buena para que trate a Eli, le pregunto por la Comisión Estatal de Atención a Víctimas y asienta con la cabeza pero confirma, no han recibido atención especializada para sobreponerse al impacto y estrés post-trauma.

Hay un personaje, Yannik Nordín, director de la Fundación Michou y Mau a quien ubica como el enlace con el gobernador. Recuerda que cada día que se siente insatisfecha con las respuestas de los médicos, este personaje que no es parte del gabinete de Jorge Aristóteles Sandoval, es capaz de enlazárselo y hacerlo traer para que hable con ella.

Reconoce Yolanda Garcia, que ha hecho enojar al Gobernador con su insistencia e inquietudes de madre, pero le importa poco, su meta es concretar que su hija sea traslada al hospital especial en Galvestón, Texas. Sin embargo, según la página de internet, sólo atienden a menores de 18 años y, ocasionalmente, personas de 21 años.

Elizabeth de la Rosa García, ya tiene 26.

Existe la visa humanitaria o por razones médicas para entrar a Estados Unidos y la propia Fundación Michou y Mau, en su sitio web explica que ellos, en colaboración con gobiernos mexicanos se encargan de los trámites de urgencia. Yolanda recibió el patrocinio del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Jalisco y ya tiene su pasaporte, pero desconoce qué sigue.

No ha rendido declaración, no conoce detalles de la carpeta de investigación en la Fiscalía, y solo sabe que son 405 mil pesos lo que le corresponden de indemnización, según lo que el propio secretario de gobierno y Gobernador le advirtieron en una reunión “no le alcanzarían para un tratamiento de su hija en un hospital privado”. Antes del 5 de junio el gobernador vía telefónica, le dijo que tramitaban el tema de recursos, y le avisaron que no se habían aprobado.

En realidad el Gobernador anunció vía Twitter, que solicitó al Congreso del Estado la aprobación de la erogación del costo que implica, trasladar a la víctima más afectada del 21 de mayo de 2018, pero Yolanda, tiene sus miedos.

Entre 8 y 15 mil dólares oscila el tratamiento de niños y adolescentes quemados que llegan al hospital de Galvestón, Texas. Incluso, el convenio con el gobierno de Jalisco abarca la creación del primer banco de piel con la Secretaría de Salud, pero a Yolanda le contaron otra historia de imposibilidad pero debía agradecer que su hija lleve casi tres semanas en un hospital privado porque la pudieron haber enviado al Hospital Civil.

Elizabeth de la Rosa García, no ha recibido atención psicológica, ya comienza a estresarse y ello, como en cualquier padecimiento, siempre es el peor enemigo.