Guadalajara, Jalisco. 

Este viernes 3 de abril se conmemora el aniversario número 117 del natalicio Lola Álvarez Bravo, reconocida como la primera fotógrafa mexicana.

Su nombre de nacimiento fue Dolores Martínez de Anda y nació en Lagos de Moreno, en Jalisco, aunque a corta edad se mudó a la Ciudad de México. Contrajo matrimonio con Manuel Álvarez Bravo y fue por su influencia que se inició en la fotografía. Luego de su separación nueve años después, es que Lola inició su propia trayectoria profesional.

Lola Álvarez Bravo trabajó para la Secretaría de Educación Pública y fue parte de la vanguardia modernista de los años treinta, a la que dio continuidad en obras como Unos suben y otros bajan.

Las actividades que desempeñaba le permitieron ampliar sus vínculos con la comunidad artística e intelectual. Su fotografía fue afín a las visiones y preferencias de creadores que fueron sus amigos y cómplices: María Izquierdo, Diego Rivera, Frida Kahlo, Rufino Tamayo, entre otros, con quienes compartió el aprecio por las obras del arte popular, fuente de inspiración de las artes visuales mexicanas en el periodo 1920-1960.

Activa en el retrato, la publicidad, el fotomontaje, la foto de arquitectura, en su obra hubo lugar para las elegías de la vida sencilla y del cuerpo desnudo.