Por Gabriela Arreola

Son sólo tres casos de bullying los que la Procuraduría atiende en el municipio, todos ellos en la zona urbana y en escuelas de educación básica. Según Juan Bernardo Santos Hernández, delgado de esta dependencia estos se deben en su mayoría a que los menores de edad agraviados tienen alguna característica física o discapacidad que es tomada en cuenta por sus compañeros o maestros para referirse a ellos con términos peyorativos que incluyan o no violencia física.

“En la delegación contamos con tres denuncias en lo que va del año, tres denuncias por bullying. Normalmente son alumnos que pueden tener algún tipo de discapacidad física, lo que provoca algún tipo de burlas o apodos en el alumnado; que le digan algún apodo o le llamen caracterizándolo por alguna situación física o lo presionen a diferencia de otros alumnos, etcétera…”, señala.

El bulliyng aumentó en Jalisco

De acuerdo con una nota del diario estatal El Informador, en lo que va de 2017 las cifras de denuncias por bullying hechas a la Secretaría de Educación Jalisco aumentaron con respecto a las del año pasado: de ser 84 en 2016, se reportaron 105 casos hasta el mes de septiembre del año en curso.

El apoyo que brinda tanto la Procuraduría como otras dependencias gubernamentales a los casos de bulliyng consiste en dar atención psicológica al menor afectado y a sus familiares, además de asesoría jurídica sin costo.

“Pues nosotros más que nada como institución (brindamos) la atención psicológica y de salud al menor. Si es el caso de presentar algún tipo de denuncia, el acompañamiento consiste primero en la atención psicológica al menor, que es lo más importante: que el niño se encuentre estable, que quiera seguir acudiendo a la escuela. Lo primero es el menor, después se continúa con el acompañamiento a la Fiscalía por medio de abogados que pertenecen a la delegación o a la institución de UAVI (Unidad de Atención a la Violencia Intrafamiliar) para que los asesoren jurídicamente a los familiares” asegura Santos Hernández.

Cómo detectar y tratar

La psicóloga de la Unidad de Atención a la Violencia Intrafamiliar del DIF Cuesta Blanca,  María Guadalupe Moreno Estolano, explica cómo es que los padres o tutores de un menor pueden darse cuenta de que éste es víctima de bullying y precisa por qué es importante que se les brinde atención psicológica a los niños:

“En algunas ocasiones los niños se van a mostrar temerosos, no van a querer ir a la escuela. Que se vuelvan retraídos, que se vean como niños tristes, siempre hay que saber escuchar a los niños. Se tiene que dar atención, porque para comenzar están en una edad de desarrollo y esta parte del bullying puede llegar a modificar características de personalidad a corto o a largo plazo”.

Cabe resaltar que el bullying se refiere a la violencia física, verbal o psicológica ejercida hacia una persona regularmente menor de edad en el entorno educativo, ya sea por compañeros o incluso por parte de maestros o directivos. En este último caso, cuando los niños son agredidos por los profesores o directores, debido a que se trata de servidores públicos, puede levantarse una queja ante Derechos Humanos.

Sobre los tres casos

Cabe resaltar que los tres casos de los que se tiene conocimiento provienen de escuelas de educación básica de la cabecera municipal. Se tuvo la prudencia de no dar datos de los menores y de las escuelas para no violentar su derecho a la privacidad y que los casos sigan su curso sin ningún inconveniente.

Hay algunos sesgos. Por ejemplo, se reconoce que el número de casos es mayor en el municipio, pero se señala que un enorme porcentaje no se denuncia; además, no se tiene conocimiento de qué ocurre con las escuelas en la zona rural.

Las dependencias que pueden asesorar y dar atención psicológica son: Centro de protección a la Infancia, ubicado en Nicolás Bravo a un lado del Campo Deportivo Pedro Moreno y la Procuraduría para la Defensa de Niños, Niñas y Adolescentes, cuya delegación se encuentra en el DIF de Cuesta Blanca.