Perros en la vía pública, un problema que debe ser atendido desde diversas trincheras




Por Paúl Martínez Facio

Vecinos de las Torres reportan que dentro de esta colonia de reciente construcción, el número de perros que deambulan por las calles se ha convertido en un problema, ya que además, la mayoría de estos no pertenecen siquiera a los residentes, o definitivamente ni siquiera tienen dueño. Lo siguiente comparten vecinos de Las Torres:

«Si hay varios, si hay, y lo que pasa es que como la basura, ya ve que a uno a veces se le hace fácil y deja uno las bolsas afuera».

«Pues es que a veces si hay más, aquí casi siempre nomas es esa, la perra esa, pero a veces si andan hasta unos cuatro o cinco, o más, luego a veces anda en celo la perra, no pues el perral atrás de ella».

«Vienen de otros lados y sabe, vienen, pero ningún perro de los que andan en la calle tienen dueño, esa perra que llegó, de hecho tuvo más perros, son también otros que andan ahí, unos ya se los llevó la perrera, los que han podido agarrar se los llevan, pero a otros no los han podido agarrar».

Entre los problemas que se derivan de esto, denuncian que los animales esparcen la basura que se queda en las esquinas, o dejan sus excrementos sobre las banquetas. La situación ya se ha reportado al Centro de Salud y Control Animal, sin que haya sido posible erradicar el problema.

«Pues si han venido, pero no sé, aquí casi no hay, lo que hay así para allá».

«Los esconde la gente, también, esa perra no sé de quién sea, han venido varias veces pero todas las veces se les ha escapado, lo guardan en esa casa amarilla… no es dueño, sino que la perra anda aquí, hasta ya sabe esa mugre perra, se ha escapado varias veces».

«Y es que cuando pasa la perrera, hay gente que yo creo que quiere mucho a los perros y los mete, pero nomás por el ratito que pasa la perrera, ya después los vuelven a sacar».

Al respecto, personal del Centro de control animal, afirma que acude a verificar los reportes, sin embargo, también es común que se encuentren con reportes falsos, o que cuando lleguen al sitio señalado, no se registre presencia de animales sueltos, sea por se mueven de sitio o porque son resguardados por los vecinos. Escuchamos a Juan de la Cruz, chofer de la unidad móvil del Centro de Salud y Control Animal:

«Vamos y la gente no coopera, de repente llegamos y “el perro es mío” y empiezan a meter los perros, y ya todos los perros tienen dueños, y cuando anda la gente ninguna mascota tiene dueño. Lo que estamos haciendo nosotros es, “el perro es mío” –me muestra su cartilla señora, no pues que “no tengo, no tengo ni comprobantes de vacunación, ni nada”, entonces el perro no es de usted, de repente que aquí nos cuida, bueno, “se lo vamos a dejar” siempre y cuando me firme una hoja donde se hace usted responsable, de que si el perro llega a agredir alguna persona, los cargos van a ir contra usted”».

En el caso de las Torres, vecinos manifiestan que efectivamente existen algunos animales que presentan conductas agresivas, y que ya se han presentado casos de mordeduras, aunque por fortuna, no han pasado a ser de gravedad.

«Sí, si son así, pero pues a veces uno no puede decir que se los lleven, porque se mete uno en problemas».

«Anda una, que es media bravilla, sobre todo con los de motos, bicicletas, y de un de repente cuando no conocen a la gente».

«Se le quiso dejar ir al niño, y él por defender a su niño, le tiro la mordida acá, en el pie… estábamos, yo andaba barriendo acá afuera, y sucede que vino el muchacho bien enojado, y me dice –señora no vio un perro así y así, le dije –no. –me acaba de morder. Vino la perrera, porque él reportó, vino la perrera, y no lo pudieron agarrar».

El problema de los animales callejeros, es sin duda una situación compleja, en la que se requiere la intervención tanto de autoridades, como de los propios vecinos y desde luego, de quienes son dueños de las mascotas, para evitar que esto llegue a ser un problema de salud pública.