Para ser investigador se necesita tener gusto y curiosidad




Por Gabriela Arreola

El doctor Jesús Muñoz Maciel se despeña desde hace algunos años como  investigador y docente del CULagos, obtuvo el grado de ingeniero en Electrónica por el Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías, uno de los campus temáticos de la Universidad de Guadalajara ubicados en la Zona Metropolitana de la capital de estado, para después doctorarse en Ciencias Ópticas por el Centro de Investigaciones en Óptica (CIO) que se encuentra en el vecino estado de Guanajuato.

Llegó al CULagos para seguir sus investigaciones

Cuenta que cuando egresó quiso integrarse a una universidad para así poder seguir con sus investigaciones y se le presentó la oportunidad de formar parte del CULagos, ahí,  junto a otros investigadores formó el cuerpo académico de Fotónica y Materiales. A continuación él mismo nos explica en qué consisten las investigaciones que lleva acabo.

«Empecé con otros compañeros también de CIO (Centro de Investigación en Óptica) y de la Universidad de San Luis Potosí, conformamos un cuerpo académico que todavía permanece. que se llama Fotónica y Materiales, nos dedicamos a estudiar diversos materiales con técnicas ópticas, en particular interferométricas y también a hacer modelado y estudiar fenómenos ópticos que se pueden medir con la luz, que es nuestra área de trabajo».

Una educación para los jóvenes

En cuanto a la parte académica, el especialista sugiere que motivar a los alumnos es algo fundamental, sobre todo ahora que las generaciones cambian de manera casi inmediata. Al mismo tiempo, recuerda su época de estudiante y concluye que los programas educativos deben adecuarse a las necesidades y modos de vida de los jóvenes:

«Todavía recuerdo cuando era estudiante, cuando tomaba clases en la prepa y en la universidad y a mis alumnos trato de motivarlos y de explicarles que eso no termina ahí en la clase, que hay aplicaciones y me gusta darles ejemplo de dónde se puede aplicar eso que se ve, que a veces es muy abstracto; por ejemplo las matemáticas, trato de convencerlos de que hay una razón de ser y que es importante que ellos lo sepan.

Además, el doctor Muñoz Maciel reconoce que para ser un investigador realmente comprometido se necesita vocación, desarrollar el gusto por un tema en particular y estar dispuesto a realizar sacrificios.

«A veces la gente piensa que la investigación es muy difícil, muy complicada, muy trabajosa, pero en realidad lo único que se requiere es tener gusto por ella, ser curioso, estar dispuesto a sacrificar algo de tiempo; lo que te gusta siempre es más sencillo de hacer, comparte.