Por Paúl Martínez Facio

Aunque actualmente la comunidad de Las Palomas cuenta con servicio de educación preescolar, primaria y secundaria, las instalaciones de las dos primeras muestran algunas deficiencias en su estructura. En el caso de la primaria se le ha dado poco mantenimiento y las aulas presentan un desgaste que comienza a ser preocupante, presentando incluso algunas cuarteaduras en su estructura.

A continuación lo que comparten algunos vecinos:

«En buen estado no están, porque la primaria está muy deteriorada, todo se está cayendo casi, la primaria, ahí es donde necesita. El preescolar también necesita apoyo, porque no tiene baños para los niños».

«Que se está cayendo, yo no he ido, todavía no me toca (llevar niños) pero sí se quejan que se están cayendo los salones».

En lo que se refiere al servicio de preescolar, que actualmente es brindado por CONAFE y atiende a alrededor de 20 niños, se ofrece en un espacio muy reducido en el que no se cuenta con la infraestructura necesaria para la atención integral de los alumnos. Blanca Fabiola Quiroz Hernández, maestra del preescolar, comparte lo siguiente:

«El espacio es muy pequeño, necesita ventilación en el saloncito, unos arbolitos, quizás a lo mejor un jueguito para distraerse, aunque sea pequeñito, en la parte del patio del kínder, otro baño para los niños, ya que nada más hay uno y se utiliza para niños y niñas».

Las instalaciones actuales han sido gestionadas en su mayor parte por medio del apoyo de los padres de familia, a través de la donación de mano de obra, mediante apoyos económicos, o como el caso del terreno en el que está construido, mediante la donación por parte de ejidatarios.

Desgaste en muros de Primaria de Las Palomas

«Bastante trabajo le costó que les donaran este pedacito pero pues sí, estaría bien si se pudiera extender un poquito el espacio hacia el terreno que está a un lado, porque si te fijas para este lado ya no hay, más bien para acá», añade la docente.

Si bien por ahora la situación resulta medianamente manejable, la tendencia normal es que aumente el número de niños continuamente, situación que es visible a lo largo del curso. Dice:

«Pues de hecho así es, aquí en preescolar yo llego y las preinscripciones de febrero solamente son seis, ocho niños, pero en el transcurso del ciclo me van llegando más y se va extendiendo más, siempre tengo alrededor de 25 hacia abajo, te digo, entonces son poquitos los que se preinscriben pero ya se van aumentando».

Una situación que por desgracia, se repite constantemente y de manera más particular en las zonas rurales, en las que son los padres de familia quienes tienen que sostener con sus propios recursos las mejoras necesarias para la educación de sus hijos.