Por Jonatan Gallardo

La información es un derecho humano. Las sociedades se conforman a través de redes y deben estar circulando entre sí: los medios de la localidad tienen que conocer a los policías, a sus gobernantes y a la sociedad civil generalizada, para que ellos puedan generar proyectos colaborativos nuevos. Cuando estos procesos se rompen no es más que una cadena de consecuencias.

Por ello la desinformación es tan grave que atenta contra los derechos de las personas. En Lagos de Moreno desapareció el medio impreso más consultado, lo que recuerda que los reporteros están aquí por las audiencias, únicas personas a quienes se deben.

Cuando esto sucede, queda como responsabilidad trabajar en colaboración con medios de comunicación independientes que sí estén centralizados, con mayor fuerza en materia financiera y herramientas tecnológicas, para poder generar condiciones de información, porque el desconocimiento de la entidad, municipio y localidad donde vivimos únicamente va a ocasionar conflictos sociales.

«Que tenemos que hacer que la audiencia nos voltee a ver cómo individuos, no como medios de comunicación. A nosotros nos van a quitar el apellido seis o siete u ocho o doce veces en nuestro trayecto como comunicadores, pero nuestra audiencia siempre tiene que saber que vamos a ser las mismas personas independientemente en donde publiquemos. Entonces ésta es la manera de que nosotros podemos generar alianzas. Así si desaparece el periódico que ellos consultaban pueden seguir consultándonos en nuestras redes sociales, en radio, en la televisión o en cualquier plataforma que nosotros tengamos», explica el periodista Ricardo Balderas.

Pero estos procesos son de acercamiento, el problema surge cuando los medios de comunicación para los que se trabaja no tienen estas actividades de enlace o de enroque con la ciudadanía. Por lo que los comunicadores tienen que empezar a generarlas.

«Porque si yo no sé quién me está gobernando no voy a saber por quién votar. Los procesos democráticos siempre son en cadena, entonces los procesos democráticos no son sólo el votar, el salir a la calle a votar, emitir el sufragio, sino el estar vigilantes, el proponer, las asambleas comunitarias, el conocer las redes de escuelas para que tus hijos puedan tener mejores oportunidades… Entonces, si yo desconozco el pasado o el presente de un funcionario público de mi localidad, yo no voy a saber qué herramientas voy a  poder presentar ante las autoridades para que mejoren las problemáticas de mi localidad».

La comunicación tiene una función social que debe ser tratada de manera objetiva. El problema es que la mayoría de los medios suelen enfocarse en lo que dicen los funcionarios públicos y no en lo que la gente tiene que decir.