Guadalajara, Jalisco. 

Este 30 de abril será un día del niño y de la niña diferente, la contingencia sanitaria así lo obliga y no podrán celebrarse grandes fiesta con colores, globos, dulces y muchos juguetes, en parte porque las tiendas que venden todos estos divertidos insumos están cerradas, no son giros esenciales y los niños se quedarán sin los clásicos juguetes que se venden en la calle Juan Manuel del Centro Histórico de Guadalajara.

Ahora las cuadras donde antes había gente aglomerada en tiendas y banquetas, están desiertas, las cortinas uniformemente cerradas y con letreros que anuncian la desesperada lucha de los comerciantes por no sufrir tan duro el golpe de la parálisis económica.

Fotografía: Celia Niño

En los letreros pegados e las fachadas de las jugueterías se leen mensajes similares: "disculpe las molestias, estamos a sus ordenes vía whats app" y luego los números telefónicos de aquellos que buscan vender con la modernización obligada de sus negocios ahora también de manera virtual.

Algunos más organizados colgaron lonas que lanzan una clara advertencia al gobierno: "Así no. Cinco años de pérdidas por el tren ligero. Cerrado por coronavirus sin percibir ni un peso, pagando rentas, pagando al IMSS, pagando sueldos, impuestos, agua, teléfono, luz, camión de basura", y en mayúsculas, a nombre de los comerciantes del Centro Histórico piden el apoyo de las autoridades.

Fotografía: Celia Niño

Por cierto que el costo por renta de locales comerciales en las cuadras de las jugueterías son de 15 mil pesos mensuales, los más económicos, lo que sin ventas, hace prácticamente imposible que estos comerciantes resistan en tanto pasa la contingencia o las autoridades les permitan reiniciar su actividades.