Vuelve a Alemania histórico avión secuestrado por terroristas en 1977




Stuttgart, Alemania.

El histórico avión "Landshut" de la compañía Lufthansa, cuyo secuestro hace cuarenta años por los terroristas de la Fracción del Ejército Rojo (RAF, por sus siglas en alemán) causó una gran conmoción internacional, llegó hoy a Alemania procedente de Brasil.

El traslado de la mayor parte del fuselaje de esta vieja aeronave comercial, convertida a día de hoy en chatarra, se realizó en un avión de mercancías Antonov 124 que esta mañana aterrizó en la ciudad alemana de Friedrichshafen, en el sur del país. El resto de piezas se prevé que lleguen a Alemania el próximo miércoles.

Una vez que el retorno de la aeronave se haya completado, se procederá a su ensamblaje para a continuación incorporar la pieza histórica a la exposición permanente del Museo Dornier de Aviación Friedrichshafen.

El "Landshut" no es un avión cualquiera. La antigua aeronave de Lufthansa recuerda uno de los momentos más críticos del llamado "Otoño Alemán" de 1977, el punto álgido de los años en que la tranquila Alemania de la posguerra fue castigada por el terrorismo.

El drama del "Landshut" tuvo al mundo en vilo durante cinco días en octubre de 1977. Cuatro extremistas palestinos secuestraron entonces sobre territorio francés el avión con 91 pasajeros a bordo, que viajaba de Palma de Mallorca, en España, rumbo a Fráncfort.

Los atacantes actuaban en nombre de la RAF alemana, un grupo terrorista de extrema izquierda que fue responsable de secuestros y de decenas de asesinatos de políticos y empresarios en las décadas de 1970 y 1980. Con el secuestro del "Landshut", la RAF quería forzar la liberación de varios miembros encarcelados.

Tras cinco días de infarto con paradas en Roma, Chipre, Dubai y Adén, en el sur de Yemen, un comando de la tropa especial germana GSG 9 asaltó finalmente el avión en Mogadiscio, la capital de Somalia, y liberó a los rehenes.

El traslado de la chatarra desde el norte de Brasil, lugar donde el avión se oxidaba desde hacía años en el "cementerio de aviones" del aeropuerto "Pinto Martins" de Fortaleza, busca ahora conmemorar ese capítulo oscuro de la historia germana.

A principios de agosto de este año la noticia de que el Gobierno alemán había comprado y estaba dispuesto a gastar una suma millonaria por "repatriar" los restos de un viejo avión comercial sorprendió a la opinión pública brasileña.

Alemania compró el avión por 75 mil 936 reales. Los costos finales de desmontaje, traslado, nuevo montaje y modernización ascenderán sin embargo a los 2.3 millones de dólares.