Stuttgart, Alemania.

La justicia alemana decretó hoy libertad para el directivo de Porsche que fue detenido hace tres meses en el marco de un registro llevado a cabo en varios locales de la automotriz alemana por su presunta implicación en el escándalo de manipulación de motores diésel que saltó en 2015.

Cumpliendo con el pedido realizado anteriormente por la Fiscalía, un tribunal de Stuttgart, en el suroeste de Alemania, levantó la orden de prisión provisional que pesaba sobre el mánager del fabricante automovilístico por riesgo de fuga y entorpecimiento de la acción judicial.

Según ha trascendido, el hombre recupera la libertad pero los jueces le han impuesto medidas cautelares, entre ellas, debe entregar su carnet de identidad y su pasaporte y no puede abandonar el país. Además, tampoco se le permite entrar en contacto con otros acusados en el proceso abierto contra Porsche y Audi por manipulación y tampoco con testigos o potenciales testigos del caso.

Las investigaciones abiertas en Porsche se dirigen contra tres personas. Además del mánager, la justicia germana también tiene en su punto de mira a otro miembro de la directiva de la automotriz y a un antiguo trabajador de la compañía. Todos ellos son sospechosos de fraude debido a la instalación de dispositivos que disfrazaban las emisiones reales de gases contaminantes así como de un delito de publicidad engañosa.

Porsche forma parte del grupo automovilístico Volkswagen, una compañía que en 2015 escandalizó al mundo tras reconocer haber vendido 11 millones de vehículos manipulados a escala global.