Autlán de Navarro, Jalisco. 

Decenas de personas se reunieron este viernes en el Museo y Centro Regional de las Artes para recordar al pintor Everardo Jiménez, quien por más de 20 años fue impulsor de las artes plásticas en Autlán y maestro de cientos de niños, jóvenes y adultos en este municipio.

El homenaje arrancó con la participación de Marcela García Rojas, integrante del Colectivo Los Autlecos, quien leyó un mensaje en representación del colectivo para quien fuera su maestro y amigo. Lo recordó como un hombre bondadoso y honesto que siempre dignificó el arte.

“Nació en libertad un 3 de agosto del lejano 1967, la Chirimoya fue artífice de los sueños que lograron materializarse. Poseedor de una técnica y habilidad para el dibujo, gran intuición para el color y buscador de su lugar en el complejo camino del arte. En Oaxaca estudió el taller de Rufino Tamayo donde aprendió nuevas formas creativas que trasmitió a sus innumerables alumnos. Bondadoso y honesto siempre dignificó las obras propias y las ajenas”.

La pintora Graciela García Nava, una de las alumnas más antiguas del maestro Everardo, tomó el micrófono para recordar cómo fueron sus inicios en las artes plásticas en el 2003 y como inició el taller La Chirimoya, fundado por el pintor.  Lo describió como una persona incansable, que siempre estuvo trabajando y que luchó por un espacio digno donde impartir sus clases.

“No me alcanzaría un día, una semana, para hablar de todo lo que significaba como maestro, como amigo y lo que en sí era como persona (…) lo que me llevo en el corazón, aparte de sus enseñanzas como maestro, es su amistad”.

El artista Hiram Villaseñor, indicó por su parte, que Everardo fue impulsor de cientos de jóvenes que como él, iniciaban en las artes plásticas. Describió su obra como novedosa y lleva de expresión.

“La obra de Everardo era color y expresión, desde el amarillo de una flor, el bermellón de un amanecer, los azules, era conjugar todos esos elementos y hacer cosas nuevas. Fue una persona entrega al arte, conectada con la naturaleza, una persona con carácter fuerte pero lleno de sensibilidad”. 

En el homenaje también contó con la participación de Emmanuel Arias, que leyó el microrelato Boreal y los poemas Atl y Flores vacías, todos de su autoría. En la música el guitarrista Armando Pedraza junto con Leticia Vidrio Interpretaron tres piezas compuestas por Pedraza; El tiempo se alejó de mí, Fénix y Pinceladas de Everardo Jiménez.

Además como parte de este homenaje, se inauguró la exposición “Que ganas de convertirme en recuerdo y nutrirme de los recuerdos que de mi tengan”, que incluye 16 obras de Everardo Jiménez y 27 de los integrantes del colectivo. Ésta permanecerá en el museo hasta el 30 de noviembre.