Guadalajara, Jalisco.

Para acatar el mensaje que enviaron los electores el 1 de julio, el PRI no requiere cambiar el nombre, sino hacer una transformación a fondo y definir si quiere ser un partido que defienda la ampliación de derechos o ponerse de plano del lado conservador, advirtió el gobernador Aristóteles Sandoval Díaz.

El mandatario estatal dio un discurso fuera de programa, durante la entrega del doctorado honoris causa a Tabaré Vázquez, en el paraninfo Enrique Díaz de León de la Universidad de Guadalajara (UdeG).

“El mensaje que los ciudadanos le dejan a este país y a nuestro partido no es cambiar de nombre, sino cambiar de fondo. El mensaje es un ‘adáptate porque los tiempos han cambiado’, es un ‘escúchame’ para poder entendernos, es un ‘yo mando’, no tú cúpula o tus compañeros”, advirtió Aristóteles Sandoval.

Sandoval Díaz dijo que el PRI debe dejar de lado las “ambigüedades” y definir si se pone del lado conservador o progresista, tras recibir la peor derrota electoral en su historia.

“En el caso de México y de mi partido entraña el llamado de un electorado que nos urge a definirnos, en nuestro caso a dejar las ambigüedades. Decir con claridad si vamos a ser el partido que defienda las causas más progresistas: ampliación de libertades, legalización de ciertas drogas y una repartición justa y equitativa de la riqueza producida, o si vamos a seguir con visiones tecnicistas, frías –y hay que decirlo- conservadoras”, subrayó.

El gobernador de Jalisco señaló que tomó la palabra para hablar del tema, precisamente porque Tabaré Vázquez, presidente de Uruguay, es un crítico del sistema y de sus efectos.

El público que escuchó el discurso del gobernador estaba conformado sobre todo por universitarios y por algunos políticos, entre ellos el alcalde de Guadalajara, Enrique Ibarra, y el diputado federal electo, Tonatiuh Bravo Padilla.