Evitan instalación de Baratillo por focos rojos de coronavirus
Fotografía: Georgina García Solís




Guadalajara, Jalisco.

Las 52 cuadras de las calles 38 y 40 que son parte del “Baratillo” estuvieron custodiadas desde las 5 de la mañana del domingo para evitar que se instalara.

La dirección de Tianguis y Espacios Abiertos de Guadalajara implementó un amplio operativo para que se respetara la instrucción de no llevar a cabo el tradicional tianguis por ubicarse en una zona de focos rojos de contagio de coronavirus, informó el supervisor, Luis Fernando Morales.

A pesar de la suspensión de uno de los mercados sobre ruedas más grande de Latinoamérica, los comerciantes se presentaron y protagonizaron alternados con los funcionarios municipales al evitarse su instalación.

Los tianguistas permanecieron en la zona en espera del retiro de los inspectores y de la policía municipal para montar sus puestos, lo que nunca sucedió.

Entre los comerciantes que no se resignaban había personas de la tercera edad como María Elena Ramírez, quien se mueve en silla de ruedas.

“Yo me pongo desde las 5 de la mañana, me hacen el favor de ponerme el puesto, yo pago para que me pongan el puesto porque yo no puedo sola, entonces oiga no es justo. Ya cuando vi en la televisión dejé los guisos a medias. Yo vendo tacos de visera, hígado, corazón y todo, apenas tengo para surtir, tuve que pedir prestado, no es justo lo que nos hace el señor, como él tiene para comer”.

Luis Alonso, quien ofrece servicios de terapia física en el Baratillo, también esperaba que se quitara la vigilancia para tratar de llevar algo de dinero a casa.

El Ayuntamiento de Guadalajara implementó el mismo operativo en los tianguis de Santa Tere y Polanco, zonas con casos de COVID-19.


Georgina Iliana García Solís