Guadalajara, Jalisco.

Las carencias en clínicas y hospitales del IMSS en el Área Metropolitana de Guadalajara, no son nuevas. El problema es que no existe mejoría y la sobrecarga de trabajo persiste, pese al cambio en el gobierno federal, relataron enfermeras y doctoras entrevistadas, quienes señalaron que existe carencia de personal médico, lo que dificulta la atención con calidad y calidez a los pacientes.

Destacaron los casos de los hospitales Regional 110 (Oblatos), 14 (Jardines de la Paz) y 89 (Avenida Washington y Chapultepec).

Rocío Rodríguez Ramírez, enfermera del Hospital General de Zona número 89, relató que a ella la cambian en forma frecuente de un servicio a otro, ante la falta de enfermeras. En el lugar existe sobrecarga de pacientes.

“Los jefes dicen ‘la plantilla está completa’, pero como va a estar completa, si a diario, nos mueven de un servicio a otro. Si ustedes van al hospital, van a ver a muchos pacientes esperando consulta; ¿por qué?, porque ni los médicos ni las enfermeras están cubiertos. El problema no es tanto para nosotros, para nosotros como trabajadores, el problema es para el derechohabiente”, subrayó.

Otro problema frecuente es que los aparatos médicos se descomponen y tardan semanas para que se reparen, por lo que la atención a los pacientes se difiere, reveló la doctora Martha Patricia Ortega Cervantes, estomatóloga, esto es, especialista en enfermedades de la boca (dientes, lengua, paladar, labio, dientes).

“Por ejemplo, yo en mi área, que es la estomatología, no contamos con aparatos que se descomponen y son caros y necesitan ser reparados o tardan mucho en reparar. Eso nos daña como trabajadores, ya que nosotros queremos lo mejor para nuestros derechohabientes”, indicó.

En el caso del Hospital General Regional 110, en Oblatos, hay saturación de pacientes, sobre todo en el área de urgencias.

Maribel Ramírez, enfermera general quien trabajó en la clínica 110 durante 11 años, dijo que hay ocasiones en que hay 120 pacientes en urgencias y únicamente ocho enfermeras para atenderlos, además de que deben hacerse cargo de los ingresos de nuevos enfermos. Además, hay carencias de material.

“Nosotros en ocasiones -te hablo de lo que yo viví dentro de ese hospital 110- teníamos 120 pacientes en el área de urgencias, con 8 enfermeras. ¿Tú que puedes dar de atención de calidad y calidez?”, se preguntó.

Las entrevistadas señalaron que en algunas ocasiones no hay camillas, no hay medicinas o no hay médicos. Dijeron que los pacientes y sus familiares se quejan y les gritan a los empleados, pero explicaron que corregir esas carencias, no es responsabilidad de los trabajadores del IMSS, sino de los directivos.

Agregaron que es frecuente ver pacientes en sillas, canalizados con suero o de plano sentados en el piso, con una cobija, porque hasta las sillas se ocupan en su totalidad.