El Congreso de Perú abre debate sobre renuncia o destitución de Kuczynski




Lima, Perú.

El Congreso de Perú comenzó este jueves a debatir si acepta la renuncia a la presidencia de Pedro Pablo Kuczynski o si lo destituye, mientras su sucesor, Martín Vizcarra, viaja desde Canadá para asumir el mando el viernes.

Tras meses en la cuerda floja por sus vínculos con la brasileña Odebrecht, el empresario y ex banquero de Wall Street de 79 años, que había asumido hace 20 meses, arrojó la toalla el miércoles en vísperas de la Cumbre de las Américas, que reunirá el 13 y 14 de abril en Lima a una treintena de mandatarios, entre ellos el estadounidense Donald Trump.

"Les pido por favor que estemos a la altura del debate que corresponde al Congreso", dijo el jefe del parlamento, el opositor Luis Galarreta, al abrir la sesión plenaria a las 17h00 locales (22h00 GMT), a la que no asiste Kuczynski.

"No es un día feliz para el país, no es día del que nos sentimos orgullosos por lo que pueda pasar. Es un día difícil, complicado", dijo ante el plenario el opositor Víctor Andrés Belaúnde.

La sesión se extenderá por tres horas, dijo Galarreta, pero la decisión de aceptar la renuncia de Kuczynski o de destituirlo, será votada el viernes, antes de tomar juramento a Vizcarra.

En el año 2000, el Congreso destituyó a Alberto Fujimori cuando éste envió una carta de dimisión a la presidencia por fax desde Japón, adonde se marchó acuciado por un escándalo de corrupción.

Kuczynski es el primer presidente que pierde su puesto por el torbellino Odebrecht, que salpica a otros exmandatarios peruanos como Ollanta Humala, en prisión preventiva desde hace ocho meses junto a su esposa Nadine Heredia, y Alejandro Toledo (2001-2005), sobre el que pesa una pedido de extradición desde Estados Unidos.

En diciembre, Kuczynski sobrevivió a un primer intento de destitución gracias al sorpresivo apoyo de una decena de legisladores opositores encabezados por Kenji Fujimori, el hijo menor de Alberto Fujimori, a cambio del indulto que sacó al ex mandatario de la cárcel, donde cumplía una condena de 25 años por crímenes contra la humanidad y corrupción.

Los obispos católicos exhortaron este jueves a recuperar la ética y la moral en Perú y llamaron a todos los partidos a apoyar al gobierno de Vizcarra.

"Hemos llegado a un punto de quiebre político. Un nuevo comienzo exige no solo un cambio de mando sino la recuperación ética y moral del país en todos los niveles", señaló la Conferencia Episcopal en una declaración.

- ¿Cambiarán las cosas ? -

El vicepresidente Vizcarra, actual embajador en Canadá, viaja este jueves a Lima para asumir la presidencia el viernes y completar el actual periodo, hasta julio de 2021.

"Tengo la convicción que juntos demostraremos una vez más que podemos salir adelante", escribió en Twitter Vizcarra, que este jueves cumplió 55 años y al que le aguarda una labor titánica al carecer de partido político en un Congreso dominado por Fuerza Popular, que lidera Keiko Fujimori.

"Se dice que cambiarán las cosas, pero soy pesimista (...). Hay que cambiar la política, las reglas de financiamiento de los partidos políticos para que esto no vuelva a ocurrir", opinó Gaspard Estrada, director del Observatorio Político de América Latina y del Caribe (OPALC) de la Universidad de Ciencias Políticas de París.

- Keiko gana, Kenji pierde -

La salida de Kuczynski se precipitó después de que líderes de Fuerza Popular difundieron el martes un video en el que aparece Kenji Fujimori tratando de convencer a otro legislador para que rechazara la destitución de Kuczynski a cambio de favores políticos.

Fue precisamente un video el que condujo a la caída de Alberto Fujimori, al dejar en evidencia las maniobras de su jefe de inteligencia Vladimiro Monstesinos para comprar votos de legisladores.

La guerra fratricida por el liderazgo del fujimorismo se ha saldado así con una victoria de Keiko, de 42 años y dos veces candidata presidencial, sobre su hermano de 37 años, quien también tiene ambiciones presidenciales.

El futuro de Kenji, el parlamentario más votado en las dos últimas elecciones, depende ahora del Congreso dominado por su hermana, pues tras divulgarse el video, abrió un proceso para desaforarlo.

Kenji no asistió este jueves al plenario.

Keiko también ha sido salpicada por el caso Odebrecht. La empresa afirmó que aportó 1,2 millones de dólares a su campaña de 2011, por lo que es investigada por la fiscalía.