Guadalajara, Jalisco.

El espíritu de las fiestas decembrinas llega de diversas formas, depende de la religión y las costumbres el cómo lo celebra cada quien.

La Navidad es “una alegría” que le gusta compartir a Jorge Castro quien desde el 30 de noviembre tiene su Uber decorado con adornos navideños.

Cuenta que entre las fiestas que más celebra su familia están: el Día del Grito, Navidad y Año Nuevo. La primera vez que decoró su Uber fue por motivos del 15 de septiembre, colocó unas banderas de México en las ventanas, cambió los dulces regulares por uno típico mexicano “borrachitos”, contó que sus clientes quedaban encantados.

En octubre y noviembre, puso un altar de muertos en el que colocó veladoras, platos de comida de barro, papel picado, una calavera de azúcar y una maceta de flor de cempasúchil, fue entonces que cambió los “borrachitos” por unas calaveras de azúcar, de nueva cuenta, sus clientes lo consideraron un “éxito”.

Para el 20 de noviembre, adornó el tablero con un machete y rifle de madera, sombreros, zarapes y huaraches miniatura.

Luego, llegaron las decoraciones navideñas, lo primero que colocó fue un nacimiento miniatura, el cual pegó a un cartón y decoró con aserrín verde para simular el pasto. Compró unas figuras con forma de pingüino, un muñeco de nieve, un Santa Claus y un árbol de navidad.

Jorge creyó que no era suficiente y metió una serie navideña que decorara el interior, consideró que faltaba algo, así que también compró fieltro y bolas de unicel para crear unos cuernos y la nariz de un reno que decoraran el exterior de la camioneta que maneja.

Durante la semana de la FIL, Jorge Castro comenzó a utilizar Youtube para poner algunos karaokes y deleitar con su voz a los pasajeros, que, por cierto, algunos eran provenientes de España, Costa Rica, Argentina, Estados Unidos, entre otros.

Algunos de ellos lo describieron como “el mejor Uber del mundo”.

Además del gusto por estas fechas, Jorge decora su vehículo por otros motivos: “para olvidarnos un poquito de los problemas diarios, hay muchos problemas, desgraciadamente en nuestro país, la inseguridad, la economía del país… necesitamos algo que nos distraiga, algo que nos haga olvidarnos un poquito de lo malo, y pasar un buen rato”.

Jorge Castro es abogado, trabajó 14 años para el Poder Judicial de la Federación, pero renunció, según cuenta, porque “es un trabajo muy tensionante, muy absorbente, no tenía vida, vivía para trabajar”.

Hace 9 meses, conoció un hombre que conducía UberXL (SUV y vanes), le platicó que las ganancias eran muy buenas y decidió cambiar su vehículo por una camioneta, que, por cierto, renta.

Jorge está dado de alta en la plataforma de Uber desde enero de 2016, en sus tiempos libres se dedica a Bienes Raíces.