Zapopan, Jalisco.

Los propietarios de colegios, empresas y fincas asentadas en el polígono de 980 hectáreas de El Bajío, deberán contar con una planta de tratamiento de aguas residuales y además tener una adicional por si se presenta alguna falla.

Actualmente, muchas propiedades ya cuentan con plantas de tratamiento, como es el caso del estadio de las Chivas, pero otros sitios tienen fosas sépticas, dijo el secretario de Medio Ambiente estatal, Sergio Graf Montero.

En El Bajío no hay red de drenaje.

“(Deben contar con) plantas de tratamiento de aguas residuales, con una redundancia que evite cualquier riesgo por la falla de alguna. Es decir, hay una falla en una planta tendría que haber dos más para asegurar que en función del volumen de agua que se va a generar, se asegure que la otra opere sin problemas”, afirmó.

Sobre el caso del estadio de las Chivas, señaló que cuentan con plantas de tratamiento de aguas residuales suficientes y esas aguas las infiltran al subsuelo. Sin embargo, Graf Montero anticipó que pedirán al propietario Jorge Vergara, que implante un programa de eficiencia del uso de agua, cuando se realizan los partidos de futbol o cuando hay algún concierto.

“El estadio tiene que tener un uso eficiente del agua, de la misma manera que toda su infraestructura. Ya tiene un sistema de tratamiento que asegura la infiltración y es bastante funcional, pero al igual que todos, tienen que hacer una política de eficiencia hídrica al máximo”, advirtió.

Añadió que el estacionamiento del estadio también significa un problema, ya que tiene asfalto y eso evita que el agua se infiltre.

En el espacio de preguntas y respuestas, Luis Nieto, representante de los 400 propietarios de predios de El Bajío, dijo que llegó al lugar del foro, a la Casa Clavigero, a dar la cara y reclamó que el gobierno estatal, no consultó con los dueños de fincas y terrenos la expedición del decreto estatal a favor de El Bajío.

“No es justo que por proteger errores pasados, que no se use el hubiera, el quién fue, el por qué lo hicieron. Ya están hechos (los departamentos y las construcciones). Estoy de acuerdo en que hay que tomar decisiones, pero no decisiones unilaterales”, señaló.

Ante la postura de los propietarios, el secretario de Medio Ambiente, admitió que los dueños tienen el derecho legal de interponer un juicio de amparo e impugnar el decreto recién expedido.

Por su parte, el alcalde de Zapopan dio a conocer que se estableció una fecha límite de dos meses para “alinear” los planes parciales de urbanización con el decreto de El Bajío. Con esto, agregó, se va a evitar que se autoricen viviendas en la zona.

“Nosotros debemos alinear nuestros planes parciales y nuestro Programa de Ordenamiento Territorial al decreto, en un periodo máximo de dos meses. Establecimos que antes del 15 de noviembre estén aprobados”, precisó Lemus.

Además de no dar permisos de habitabilidad a los 650 departamentos de las Villas Panamericanas, Lemus aclaró que tampoco autorizará más infraestructura para la zona, sean calles, drenajes o alumbrado público.

En el foro también se solicitó la intervención del gobierno federal, para proteger a El Bajío.

El titular de la Semadet respondió a los 400 propietarios de El Bajío, que la Ley Estatal de Equilibrio Ecológico, no obliga al gobierno estatal, a someter a consulta el decreto de protección para que no se avale ninguna nueva construcción en el sitio.