Guadalajara, Jalisco.

La Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) abrió una investigación de oficio, sobre el asesinato del policía de la Comisaría de Seguridad de Guadalajara, Francisco Padilla Hernández, y de una mujer que fue rescatada, luego de que estuvo secuestrada en una vivienda en la colonia Oblatos.

Luis Arturo Jiménez Jiménez, visitador general de la CEDHJ, señaló que se solicitaron informes a la Comisaría de Seguridad de Guadalajara y a la Fiscalía General del Estado (FGE), bajo la hipótesis de que pudo haberse cometido un error en el protocolo de traslado de la mujer víctima de secuestro, cuando se le llevaba a un puesto de atención médica para valorar su salud. A la mujer solo la acompañaba el policía municipal que resultó muerto, el sábado pasado, en el cruce de la avenida Javier Mina y la calle Mariano Jiménez, en el barrio de San Juan de Dios.

Los atacantes del policía y de la mujer iban a bordo de una motocicleta y de dos vehículos.

“Es una acta que se abrió de oficio porque hay dos víctimas: un servidor público encargado de la seguridad y una dama que lo acompañaba. El motivo del acta de investigación es para primero, saber si (al policía municipal) se le dio el apoyo económico, psicológico y demás que correspondan a sus prestaciones laborales como servidor público y respecto de la dama que fue victimizada, que se proporcione a su familia, el apoyo del asesor legal que debe acompañarlos en el curso de la investigación de la carpeta de investigación”, explicó.

Sobre si la Comisaría de Seguridad de Guadalajara no acató el protocolo de traslado de una víctima de un delito, el visitador general de la CEDHJ señaló que eso lo deberá determinar el visitador que dará seguimiento al caso.

“Esto tendrá que valorarlo el visitador a quien se le turnó el acta de investigación. Creo que es la Segunda Visitaduría”, respondió.

El policía Francisco Padilla trabajó en la corporación de seguridad tapatía durante 20 años. El alcalde de Guadalajara, Ismael del Toro Castro, rechazó que se haya violado el protocolo de traslado de una víctima y dijo que la mujer pudo estar vinculada con el narcomenudeo. Por ello, el funcionario de la CEDHJ señaló que el presidente municipal debió ser más prudente y “guardar silencio” sobre la mujer que primero estuvo secuestrada y luego fue atacada a balazos junto al policía.