Guadalajara, Jalisco. 

Aunque las medidas de aislamiento social por la pandemia de coronavirus han cobrado vidas humanas y miles de empleos, también han traído efectos positivos medibles en el Área Metropolitana de Guadalajara, donde ha mejorado la calidad del aire y la generación de basura ha bajado casi por mitad al menos en Zapopan.

De acuerdo con el Sistema de Indicadores de la ex Villa Maicera, en marzo el relleno sanitario Picachos recibió 47 por ciento menos residuos urbanos respecto al mismo mes del año pasado, es decir, apenas llegaron 56 mil metros cúbicos de basura cuando solían recibir más de 100 mil.

En cuanto al origen de los residuos, aquellos provenientes de oficinas gubernamentales son los que más se han reducido, pues ahora solamente se genera una quinta parte de la basura registrada el año pasado, mientras que los desperdicios de casa que recolectan los camiones han bajado casi por mitad en marzo, cuando comenzó el aislamiento social.

Esta disminución de basura trae beneficios como una reducción de los gases efecto

invernadero que emite Picachos y los lixiviados que produce, que suelen derramarse por falta de confinamiento y contaminar aguas abajo.

Es de señalar que el Programa de Medio Ambiente de Naciones Unidas exhorta a los

gobiernos a implementar medidas para separar los residuos sanitarios y evitar contagios de Covid-19 entre personal dedicado al aseo público, y aunque en Jalisco no hay ningún programa de este tipo, la invitación también se dirige a los ciudadanos para que aparten aquellos desechos que tuvieron contacto con nariz y boca y los identifiquen, para prevenir a quienes los recogen.