Los besos y caricias no son delito: Guadalupe Morfín explica los cambios al reglamento de la policía tapatía




Guadalajara, Jalisco.

Seis meses después del día del amor y la amistad, el pleno del Ayuntamiento de Guadalajara aprobó las modificaciones al Reglamento de policía y buen gobierno, donde se reformó la manera de procesar a una pareja que tiene conductas sexuales en la vía pública.

Para evitar “la discrecionalidad policial y los criterios subjetivos”, la regidora Guadalupe Morfín defendió su iniciativa que busca “que tengamos una policía más garantista, y lo que hacemos es que el reglamento vaya homologado con el código de procedimientos penales”.

“Los besos, las caricias y las muestras de afecto no son una falta administrativa. Los fajes no deberían serlo, pero pueden llegar a incomodar a alguien. Será mediante una queja o una denuncia que la policía deba actuar”.

La regidora puntualizó que si existiera una queja ciudadana en contra de una pareja que está teniendo relaciones sexuales o muestras de afecto en la vía pública, la policía deberá de llevarlos a los separos municipales “pero con el caso bien documentado. Para proteger los derechos de los detenidos”.

Una vez que la pareja llegue ante el juez municipal, el funcionario deberá de calificar la falta administrativa con las pruebas que lleven los policías. Una vez que se tengan todos los elementos, el juzgador deberá sancionar con multas que van de los 806 a dos mil 15 pesos (10 a 25 UMAS) o 36 horas de arresto.

 - El exhibicionismo sigue siendo delito -

Desde que se dio a conocer la medida aprobada por el Ayuntamiento, las interpretaciones del dictamen han generado comentarios en redes sociales y medios de comunicación que abonan a la desinformación.

Guadalupe Morfín niega que estos cambios permitan el exhibicionismo, pues esta conducta sí está tipificada en el Código penal, es decir, una vez que se haya presentado la denuncia, los policías tienen la obligación de integrar un expediente como primeros respondientes, para después remitir al señalado ante el Ministerio Público.

Los cambios, insiste la regidora, sólo atienden a la manera de proceder de los policías municipales ante conductas sexuales en la vía pública. En caso de que uno de los involucrados sea menor de edad, esto se interpretará como delito y no como falta administrativa.


Omar García