Alcalde reelecto de Tlajomulco promete sanear la laguna de Cajititlán
Fotografía: Ignacio Pérez Vega




Guadalajara, Jalisco.

Después del río Santiago, el cuerpo de agua más contaminado de Jalisco es la laguna de Cajititlán. Se trata de una laguna cerrada que no tiene una salida ni entrada natural de agua, lo que genera contaminación.

Otro problema que enfrenta la laguna es que se está secando. Ha habido años muy malos de lluvia y tiene una profundidad máxima de 3.25 metros, según el dato más reciente dado a conocer por el Instituto de Limnología de la Universidad de Guadalajara (UdeG).

La laguna llegó a tener una profundidad de 6.5 metros, el doble de lo que tiene hoy. En 2000 casi se llegó a secar. Se puso un muro vertedor y eso ayudó, pero el problema persiste con el actual estiaje.

Sobre ello, el alcalde recién reelecto de Tlajomulco, Salvador Zamora Zamora, afirmó que uno de sus compromisos para el siguiente trienio, será sanear el embalse.

“Entonces tenemos mucho trabajo por hacer. Por supuesto, seguiremos trabajando por la defensa del medio ambiente, la laguna de Cajititlán. Esperamos que se sanee al 100 % en los siguientes tres años. Creo que hay muchos pendientes todavía por hacer”, precisó.

La laguna tiene muy poco oxígeno en su fondo y tiene exceso de lodos, lo que dificulta la vida en el embalse. Además tiene lirio. No es un problema nuevo y eso también debe atenderse.

En 2014, en la laguna se registró una gran mortandad de peces. Se sacaron 400 toneladas de ejemplares muertos. Actualmente se cuenta con cuatro plantas de tratamiento, pero su operación es insuficiente y se siguen registrando descargas clandestinas de aguas residuales.

Se espera que una vez que el alcalde de Tlajomulco asuma su segundo periodo, se presente un plan para el saneamiento de Cajititlán.


Ignacio Pérez Vega