Cincuenta soldados estadounidenses resultaron con lesiones cerebrales traumáticas producto del ataque con misiles lanzado por Irán en Irak este mes, informó el martes (28.01.2020) el Pentágono, que revisó al alza el conteo de víctimas.

El informe fue compartido por el teniente coronel Thomas Campbell, un portavoz de le secretaría de Defensa estadounidense. Campbell dijo que de los 50 soldados, 31 fueron tratados en Irak y regresaron al servicio, mientras que otros 18 eran evaluados en Alemania. Otro herido fue transportado a Kuwait y ya volvió al servicio, dijo, señalando que la cifra podía aún cambiar.

Las autoridades militares de Estados Unidos aseguraron inicialmente que 34 soldados habían resultado heridos en el ataque a la base de Ain al Asad (oeste de Irak) durante la noche del 7 al 8 de enero.

Teherán lanzó misiles contra las bases de Ain al Asad y Erbil, donde están desplegados parte de los 5 mil 200 soldados estadounidenses en Irak.

El ataque fue en represalia por el asesinato del general iraní Qasem Soleimani, muerto en un ataque con drones el 3 de enero cerca de la capital de Irak, Bagdad. Al momento del ataque, la mayoría de los soldados en la base estaban en búnkers, tras ser advertidos previamente por sus superiores.

El presidente estadounidense, Donald Trump, había dicho inicialmente que ningún estadounidense había resultado herido por los misiles.